El pasado sábado, durante el transcurso del partido Sevilla F.C. - Getafe C.F. disputado en Nervión, el sevillista Antonio Puerta sufrió un desvanecimiento, fue rápidamente atendido por los servicios médicos del Sevilla, consiguiendo salir por su propio pie del terreno de juego. En el vestuario Antonio volvió a sufrir otra parada, la cual le dejó semi-inconsciente, fue trasladado al hospital universitario Virgen del Rocío de Sevilla.
La noche transcurrió con muchos nervios en Sevilla, pero por desgracia, lo peor estaba todavía por llegar. A la mañana siguiente, los resultados eran esperanzadores, pero, hacia falta un milagro, que desgraciadamente no llegó.
Al medio día siguiente, sobre las tres del medio día, se dio a conocer su muerte, la cual conmocionó mucho a todos los aficionados sevillistas y béticos, que durante los dos días habían mostrado su apoyo a Puerta. Según rezaba el parte médico el jugador sufrió hasta ocho paradas cardiacas, siendo la última definitiva.
Durante esa misma tarde se instauró la capilla ardiente en el antepalco del Ramón Sanchez Pijuán, en la cual seria trasladado el féretro de Antonio Puerta. A la entrada, miles de sevillistas y béticos abarrotaban las aceras, dándole el último adiós a Puerta en el Sanchéz Pizjuan.
A la mañana siguiente fue enterrado en el cementerio de San Fernando. A dicho entierro acudieron representaciones de los clubes mas importantes de España (Real Madrid, Barça...), ex-compañeros de Antonio, todos los integrantes de la plantilla del Sevilla FC (que horas antes se encontraban en Atenas para la disputa del segundo partido de la liguilla de la Champions League), familiares, allegados y seguidores, reunidos para darle el último adiós a Antonio.
Desde aquí darle mi mas sincero pésame a la familia de Puerta y al sevillismo, que una vez más, demostraron su grandeza.
HASTA SIEMPRE ANTONIO.
